The golden age is over

Gayecuador ha muerto. Era previsible, aunque no por eso menos triste. Sobre este fin anunciado no tengo mucho que decir: no sé qué pasó con Xavier, el webmaster; simplemente desapareció. Todavía no sé si matar mi lado de escritor junto con este blog, al que extrañamente considero mi ciber conciencia. Para escribir es necesario contar, comunicar, decir algo ¿Qué tengo que contar? Cuando empecé a escribir solía exorcizar demonios, creo que ya los he conjurado. Una vez hecha la catarsis ¿qué queda? Podría decir que quedo yo ¿pero valgo la pena ser leído? Curiosamente, ahora me siento más sereno y más maduro para escribir, para comunicar, pero me hallo vacío. Escribir era mi forma de ir contracorriente, pero ahora hay un mar calmo. Siento que las tormentas ahora están en tierra.