Hambre de Manhattan

Hay lugares que siempre he querido conocer: Nueva York, París, Roma, Moscú, Berlín, Río, Londres, Tokio... No lo sé, siento que tengo que son mis "mecas" personales y debo peregrinar hacia ellas ¿Por qué? Bueno, tengo varias razones. La primera y principal es que son ciudades que han marcado a tantas, pero tantas personas que ya no son ciudades; son experiencias. creo que esta cuestión de ciudad-experiencia es la que te abre la mente. Otra razón, muy obvia, es la cantidad de edificios y lugares interesantes que poseen. Italia, mi país-experiencia favorito, es el mejor emplo de ello: Roma, Florencia, Venecia, Milán, Verona, Bolonia, Pisa... ¡Debe ser como ir al cielo! Finalmente, es porque me inspiraron para salir del lodoso y odioso Pascuales (¡puaj!), pero creo que Pasuales me persigue y la única cura posible es visitar una de estas ciudades maravillosas.
En fin, creo que este blog, rico en exhibicionismo, no debe limitarse mostrar mis pedos mentales y los hombres que me ponen como moto. Siento hambre de mundo, de metrópoli, de embullirme en la ciudad vertiginosa, de perderme en la experiencia de vivir en una ciudad que influye en el mundo. Me imagino que todas esas cotidianidades son las que inspiraron a crear tanto arte y belleza. 
Acabo de encontar este vídeo sobre Manhattan y me ha dado hambre de mundo... de ser un hombre de mundo.


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